domingo, junio 25, 2006

 

--LA LENGUA DE LAS BICICLETAS--

Amo las bicicletas.

Amo las bicicletas porque he llegado a ser el pedazo de carne con criterio sustancial que las centaura. Dios es una bicicleta y las creó a su imagen y semejanza. En la antigua Grecia ya Heráclito Fournier las veneró en su célebre Liada For Baiks.

Nos dice el poeta con voz ronca y afectada:

"Salga Aquiles si Ulises no se ve con cuerpo de conquista, a escalar la gloria del Olimpo puntuable de primera, y pierda en la hazaña un ojo si es preciso, pues ser bicíclope es lo mayor que pueda serse en La Tierra.

Y ruegue que el camino sea largo, pleno de enseñanza y si es posible con agua, que el hado del estío cocerá la sesera del viajante y la valkiria Isidra de siete cabezas por cuello desisidrata a aquel que osa subir las rampas que conducen al Nirvana. Oh, Zeus....oh, Zeus, por qué te rompiste en la batalla, porqué ya no construyes bicicletas. Oh, Zeus....Oh, Mendiz, Mendiz, el biciclo que desliza como aceite por cristal...Oh, Mendiz, de ruedas cual cuchillas.....Oh, Kona, Kona la bárbara, que arrostra el pedregal arrojada y valerosa....Oh, Kona robusta y ruda, de ruda ventura, con cuánto arrojo arrojas por terraplenes al luchador tuerto y le achichonas la testa.

Mejor con casco, Aquiles, hijo de Ulises, que perder un ojo es poco pago para la empresa, mas abrirse la caja de los idearios contra un peñasco es dolorido final y muy sangriento.

Ay, Aquiles, hijo de Otilio, no mires atrás que en sal te convertirás. No hagas aprecio del canto de las sirenas, y sí en cambio procura estar atento a los cantos de las piedras, cantos de doble filo que te atacarán las rodillas y los codos. Aprenderás en la odisea que mover el plato grande cuesta mucho más que el pequeño y que frenar con la rueda delantera te hace ver el mundo con enfoque cenital. No te dejes engañar, sólo es por unos instantes, luego te haces uno con la madre tierra y besas sus materias con ahinco............."

Robert Opelblue en su obra "El Hombre Que Tras Matar De Aburrimiento Un Montón De Caballos A Fuerza De Comeeras De Coco, Decidió Susurrar A Las Bicicletas" nos dice cómo hay que tratarlas. En las imagenes vemos el entorno considerado ideal para que las bicis se críen correctamente en cautividad.

Ha de ser un lugar seco y techado, con luz eléctrica y bombona de gas, con estanterías de madera de aglomerado macizo para colocar en ellas todo lo necesario, barnices, pinturas, rastrillos, fertilizantes, matamoscas, tijeras de podar, aguaplast, etc, con una buena puerta de seguridad (debemos asegurarnos muy bien de que lo que hemos colocado en la entrada del habitáculo sea una puerta) y una cubierta de teja imitación plástico con cámara de espuma de poliuretano. El suelo del cuarto deberá estar a la menor altura posible para su mejor aprovechamiento.

Y de momento eso es todo. Otro día entraremos de lleno en el mundo de las bicicletas.


jueves, junio 15, 2006

 

--CONSEJOS DE BALDE---

Vaya, acabo de ver dos veces la palabra rehostia en dos comentarios a sendos artículos de este blog.
Rehostia...rehostia....Eso me ha hecho pensar que el clero está muy atrás.
Siempre la ciudadanía suele andar unos pasos por delante de los políticos o los juristas o los señores de la Real Academia de la Lengua, ya se sabe.
Pero lo de la curia vaticana, es exagerado.
Los únicos que van a la par o incluso por delante de la gente son los publicistas y los marketingueros.

Al ser humano no le gustan los pseudo bocadillos de burguer y similares. Eso lo podemos comprobar mirando las estrategias comerciales que los dispensadores de esos mejunjes deben llevar a cabo para que a sus chiringuitos sigan acudiendo incautos.
El primer día que abrió una fastfoodería, supondremos que daban hambuguesas, ensaladas, patatas fritas, alerones de pollo, y poco más.
Pero como la sociedad evoluciona, ellos, los hamburgueros, se espabilan para estar a la última y que no se les aburra la parroquia, ni se les largue a otras marcas competidoras.
Actualmente estamos en la fase de que ofertan un día una hamburguesa con doble de queso parmesano, al otro día una triple de vaca con atún y lechuga rizada, y al siguiente una cuadruple de vaca con beicon y aceitunas rellenas, etc.
Y si con eso no basta, además obsequian al consumidor una pegatina de algún monigote de moda, un llavero, un muñeco de plástico, una gorra, o lo que sea.

Y con esta estrategia, independientemente de que todos sepamos que nos están ofreciendo una cosa sin gran enjundia gastronómica, consiguen que se les llene el patio.
La Iglesia –y más concretamente la católica- al ir tan por detrás de la gente, se ve menguar día a día.

¡Joder, 2.000 años sin lanzar en los medios de comunicación una promo como Dios manda.! Claro, así les va.
Desde que la abuela de mi bisabuela era monaguilla, que no se les ha ocurrido ofrecer en ninguna misa una doble de Hostia, una Hostia light baja en colesterol, una con ácido omega 3, una con bífidus activo, o una pedazo EucaristíaSuperKing de cuatro pisos.

Igual que a nadie se le ha ocurrido cambiar una rebanada de pan soriano con jamón ibérico, permaneciendo inalterable siglo tras siglo, el rollo burguer está obligado a modificarse constantemente para apostar por su supervivencia.
Yo lo veo lógico.
Pues la Iglesia, que viene a ofrecer también algo en esencia polispánico, la Iglesia que no es jamón ni pan sino panecillo y picaduras, debiera tomar buena nota.
Eso es todo.
(Y lo he dicho sin mala oblea, que conste.)


AHÍ ESTAMOS, CONCELEBRANDO, CON UN PAR.

domingo, junio 11, 2006

 

-NUEVO VIAJE A LAS CASCARRIAS-

El viajero se despereza y pede en la intimidad de la alcoba. Se baja a los fogones y le dice a Mariana que le condumie el desayuno. El camino ha de ser largo y faltarán fuerzas.
El viajero se mete al buche cuatro pancetas con cuatro rebanadas de pan blanco untadas de manteca, luego bebe un litro de aceite del que hizo el Damián para su gasto y se despide.
La Cascarria queda a 500 kilómetros, por eso no los hará andando.
Manda llamar un taxi para que le lleve a donde aparcó el coche propio y otro taxi para que vaya a buscar a su choferesa. Pues el viajero si va de escribir no conduce.

Dos horas más tarde cuando el sol requema los ribazos llega el viajero a las puertas de la comarca. Briebujuelo de Tajuña se amorra a los cerros. Pueblo de gentes dispares. Pueblo del que se dice cría mucho mellizaje.
Los vecinos de Fajueque, villa con más leyenda que prosa, dicen de ellos:

Los gemelos de Briebujuelo,
Saben quién es su abuela
Y no conocen al abuelo.
Yipi, yipi, yei.

Cuando el viajero anduvo en mocedad por esos pagos, encontró al Otilio, cartero postal de bicicleta herrumbrosa y padre también de gemelos.
Decía él que lo malo de sus hijos era no saber cuál de ellos se parecía más al otro.

El viajero sale por la comarcal 14 hacia Hullonares del Cinca. Hay que subir vericuetos del asfalto para saltarse los cerros y bajar al llano.
En Hullonares, Vitoriano Velarde, jefe de Renfe y estrambótico paisano, murió por confundir el tocino con la velocidad. Se hizo en la parrilla varios cuentakilómetros de Simca 1.200 y se conoce que no estaría en condiciones, o no los pringó bien de grasa.
La viuda, Reme Santolalla, mujer de braga floja y teta nodriza, no le guardó luto quince días. Hasta dicen los de Javalarque, gente chismosa y de recelo, que ya se incorporó al coño la parte más saliente del cuñado, hermano del muerto, al lado de él en la misma cama de velar.

El viajero llega a la posada y pregunta por el Cañares, apodo de Fermín Arjona, torero de plaza chica pero de valor grande.
Daba como nadie los pases de pecho, pero en uno de espalda, el toro se lo llevó puesto.
Un mozarrón de pelo esparraguero le dice al viajero que su padre al final no salió de las cornadas. Que se repuso de aquella que mencionada queda, pero, cabezón como ninguno, estuvo una tarde ocho horas seguidas practicando el pase de espaldas con quince morlacos que le llevaron el alma junto a las asaduras. Cornada intensiva, pues, piensa el viajero.
El viajero le da el pésame con tardanza pero el muchacho ya no pena. El tiempo cura.
La habitación es limpia y en el retrete apenas si hay algunas huellas de otros que pasaron. El viajero llama a la gerencia y acude la madre, hacendosa señora de buen ver, de mejor tocar y de castiza belleza y le dice que si se podría apurar una miaja en la higiene del váter.
Ella le confiesa que los productos de ahora, mucho patatín, mucho patatán, pero no hacen el blanco que prometen los anuncios.
El viajero comprende y disculpa. El viajero, curtido de calendarios, se arrodilla, se chupa el dedo y luego frota los residuos, repite la operación varias veces y consigue que las manchas se vayan.
La mujer ríe el ingenio del viajero y le besa la mano bienhechora. El viajero aprovecha la constatada falta de escrúpulo y se tira para abajo calzón y calzoncillo.
El viajero y la posadera fornican mientras van hablando de otros entonces y los comparan con estos ahoras.

A la mañana siguiente, muy temprano, el viajero por no frustrar el descanso ajeno, se va en silencio y no paga la cuenta. Tampoco ella le dio nada por el polvo, ni por enlustrar el cagadero.

La Cascarria, comarca de gente dispar, unos muertos, otros vivos, pero todos de provecho.
FIN CAPÍTULO I

















Camilo José Cela, premio Goya de las ciencias.

domingo, junio 04, 2006

 

--LA CASA DE LOS FAMOSOS--

La prestigiosa revista de decoración, exteriorismo y nuevas tendencias "LA CHEZ DE LA MAISON AVEC JARDIN, DES ANIMAUX ET FENETRES" nos muestra en el número del mes de Junio una mansión hasta ahora inaccesible.
Visitamos hoy la inmensa villa del famosísimo dramaturgo, pintor, bailarín,teólogo, filósofo y performer B.D.- del que no desvelaremos la identidad porque nos ha impuesto esa condición a cambio de botellas y dinero.
Nos recibió con chancletas Paco Rabanne, gafas oscuras, bombín inglés y un albornoz Luchino y Visconti de ruso italiano, que él mismo ayudó a diseñar, cortado a la altura del ombligo para que se le vieran bien los genitales envueltos en papel de aluminio.
--------------
--------------
"Hola, bon yuarg. Una vivienda para ser digna de alguien como yo debe integrarse en la naturaleza. Por eso empezaré mostrándoles mi pareja de halcones enanos del Camerún. Sé que parecen periquitos de mil pelas, pero debidamente amaestrados en el arte de la cetrería, se los lleva uno a campo abierto y cazan avispas con la minga. Hay que protegerse de ellos con un guante de acero porque esas garras podrían arrancar de cuajo el tronco de un hombre adulto y dejarlo con la cabeza encima del culo.
Se llaman Isidro y Artonia. Tienen diez años entre los dos y se alimentan de sangre.Luego, también es imprescindible tener un lago con peces que no sepan hacer nada y un perro majestuoso adiestrado para encontrarme todos los viernes sobre las cinco de la madrugada.
El fantástico borzoi se llama Tovarich Pellicena y los peces, carpas.

(Ahí vemos a Pellicena haciendo prácticas para salir de un zulo y a los peces inactivos.)

Luego, ya dentro de la mansión, es bueno guardar los documentos, los borradores de libros y los discos de calidad en un frigorífico para asegurarnos de su correcta conservación. La música a la intemperie tiende a pasarse de moda. En una nevera no. Idiotas.

Y lo último en informática. En el estudio, un ordenador de nueva generación analógica con mis mejores obras escritas en cientos de idiomas y únicamente legibles en español subtituladas al castellano. Es muy útil y sencillo. Si necesito consultar un texto, voy a mi pc y en un momento lo tengo todo en pantalla plana de pixels.

(Observamos cómo deben distribuirse las materias para que no se mezclen estilos o formatos.)

Ahora pasaremos al reciclador de vertidos.

Este rincón de la casa, no hace falta que lo diga, está diseñado por mi excelente amigo Antoni Tapies. Yo le llamo cubo de basura porque soy muy salao, pero se trata en realidad de una obra en la que el equilibrio de las formas, texturas y colores alcanza una belleza conceptual tan ultraísta, tan dadá, tan duduá, y sobrecoge de tal modo a los sentidos, que tras su contemplación prolongada, éstos se subyugan, se dejan conducir en trance al paroxismo y hasta parece que huela.

Y llegamos a los baños. Aquí micciono y voy de vientre cuando llego a tiempo. Aquí la materia orgánica del artista se pacifica y vuelve al cosmos. Aquí la paz inspira.

El grifo tiene agua corriente. Agua normal. En principio la hice poner con gas pero se me hinchaba la barriga y mis allegados sufrían de aerofagia. También a los genios nos gusta a veces gozar de las cosas más vulgares.

(Un lavabo e inodoro de diseños simples pero prácticos. Cada cosa ordenada en su lugar. Todo lo necesario para la higiene diaria.)

Y para terminar, la habitación de la casa más entrañable para mí. La maravillosa suit matrimonial de cama baja japonesa, cortinajes de diversos tejidos, dejados aquí y allá como descuidadamente, que dotan al ambiente de una espontaneidad poco común; la mesita de noche con un traste de agua para quitar la sed y otro de pastitas saladas para producirla, inspirada en el minimalismo neoyorquino de los 70; y un crucifijo de anticuario de 50.000 dólares, fechado en el año 20 A.C.

El ambiente de esta pieza es tan sugestivo que cualquiera comprenderá la imposibilidad de abstenerse del amor pernoctando en ella."

Bien. Después de ver esta magnífica mansión, todos los enviados de la revista salimos convencidos de vivir en cuchitriles. Pero éstas cosas sólo están al alcance de artistas consagrados, de mitos vivientes, de montruos de la creatividad y de enfermos de megalomanía.

En el próximo número iremos al cortijo de B. D. el famoso criador de bicicletas. Hasta entonces, a esperar pacientemente.

Un reportage de

Jean Pierre Boluás, reporter.

Denis Delmonne, photographer.

Monique García, madame de la netoyage du toilette.


This page is powered by Blogger. Isn't yours?